Apostolado



Jesús cuenta con tu colaboración

Jesús hace un gran milagro: multiplica los panes y los peces. Pero no sin antes contar con la colaboración humana: los discípulos le proporcionan lo que tienen, cinco panes y dos peces, indicándoles que los repartan (cf. Juan 6, 9-10). Él hace por lo menos el 99.9% del prodigio, pero esa milésima parte nos la pide. Consideremos el sentido salvífico de nuestra vida, en todas sus modalidades.



Hacer amar a Jesús

En su primera carta larga, el Prelado nos pide ayudar a los demás a ir por caminos de contemplación, centrándonos en la Persona de Jesucristo. Recuerda que por eso no hacemos apostolado, ¡somos apóstoles!, lo que supone tanto como llenarnos del Señor para ser capaces de comunicarlo. La sonrisa es clara manifestación de que llevamos a Dios.



Libera del Leviatán

San Pedro postrado a los pies de Jesús recibe el encargo de pescar hombres. Al revés de los peces, los hombres viven cuando se los libera del monstruo del mar, del Leviatán (Isaías 27, 1). Cualquier desgaste o sacrificio vale la pena con tal de salvar un alma. Y más ahora… que el demonio se está llevando a muchas. Sintonizar con el Corazón de Cristo, que tiene sed de almas.