Domingo de la divina



Divina Misericordia: Esperanza.

El 30 de abril del año 2000, san Juan Pablo II canonizó a Faustina Kowalska e instituyó el Domingo de la Divina Misericordia. Aprovechemos esta celebración para corregir nuestra percepción de lo divino: saber cómo es Dios nos llegará una gran paz. La Misericordia es el segundo nombre del Amor. El Amor, entendido en su aspecto más profundo y tierno, en su actitud de aliviar cualquier necesidad, principalmente en la inmensa capacidad de perdón, es la Misericordia.



Domingo de la Misericordia

En el año 2000, san Juan Pablo II estableció la fiesta de la Misericordia Divina. Nos alegramos de confiar en ella, sabiendo descansar en ese Atributo divino tan consolador. Procuremos que nuestras miserias nunca nos retraigan de buscar la intimidad con Jesús. Él quiere que nos abandonemos a la confianza.



Misericordia divina

Como tantas otras fiestas litúrgicas (Corpus Christi, Sagrado Corazón…), la de hoy fue también de iniciativa divina: Jesús se la pidió a santa Faustina Kowalska y san Juan Pablo la estableció en el año 2000. Fiesta muy consoladora, pues no meditamos tanto la misericordia que debemos tener nosotros sino la que tiene Dios. Apoyarnos en ella para verlo todo con optimismo.