Noviembre



7 de noviembre

En estado de oración

La oración es la vida del corazón nuevo, del corazón que ha recibido la participación en la vida divina. Debe animarnos en todo momento, siendo tan frecuente como el respirar. Es la respuesta al Dios que nos desea. Esa continuidad será posible si el corazón está inflamado de amor. Podemos colaborar en ese proceso ayudándonos con industrias humanas sabiendo descubrir, gracias a nuestros sentidos externos, los mensajes que nos manda Dios.