Tibieza



Tibieza, mal de Occidente.

El cardenal Sarah diagnostica que el mal de Occidente es la acedia, es decir, la extinción del deseo de Dios que se traduce en una carencia de amor hacia Él. El organismo sobrenatural ha de ir creciendo: partiendo de la obligación, pasando por las virtudes, hasta la etapa del amor. De otra manera, se envician los individuos singulares y los grupos, pues nadie es un verso suelto: todo influye.