Asunción



14 de agosto

Víspera de la Asunción

Nuestro corazón se libera de sus limitados horizontes al ver la Estrella que Dios lleva al Cielo. Alcanzaremos esa misma meta llenándonos de amor a Jesucristo. Para eso, Dios nos envía contrariedades, pues así logra que disminuya el amor propio y crezca el de Jesús. María nos precede y nos alienta.