San José: devoción íntima y afectuosa

El Evangelio llama a san José “varón justo”. El mayor elogio, porque significa santo. Un hombre absolutamente dedicado al proyecto divino. No se aplica eso de “entre azul y buenas noches”. En 1870 el papa Beato Pío XI lo nombró Patrono de la Iglesia Universal. Es, por tanto, el santo más importante, por encima de san Pedro y san Pablo. Nuestro Patrono y modelo de vida interior, de la vida sencilla y doméstica de familia.